A veces, en el fragor del día a día, atendiendo a todo lo que tenemos que hacer (o al menos a todo lo que se nos va presentando), podemos tener una sensación de que la empresa no va bien, o yo no lo estoy haciendo bien: me veo corriendo de acá para allá, siempre apagando fuegos, y hace tiempo que no tengo la sensación de estar yendo a ningún sitio. O al menos a ningún sitio que yo controle.
Pero a la vez, ¡hay tantas cosas que tendría que cambiar, que no sé por dónde comenzar! Y me debato entre no parar ni un momento, impulsado por los incendios diarios, y no hacer nada para salir o mejorar, por que no sé por dónde empezar: parece una montaña difícil de escalar, necesitaría ayuda.
Y si bien es cierto que para algunas cosas necesitas ayuda, no lo es menos que hay otras que ya sabes que podrías o deberías hacer.
Para ayudarte a comenzar a retomar el control de tu negocio, te propongo el siguiente ejercicio: identifica una cosa que puedes hacer para mejorar tu negocio, o tu desempeño. Una sola, aunque sea muy sencilla o muy pequeña. Algo que quizá hayas postpuesto durante mucho tiempo y también algo que puedas hace tú mismo.
Ahora que la tienes identificada, ponte una fecha, ahora mismo, para cuándo lo harás o lo implementarás. No sigas leyendo… espero a que vuelvas.
Bien, ya tienes una tarea de mejora, y una fecha. Ahora sólo depende de ti implantar esta pequeña mejora en tu empresa. ¿No te sientes mejor ya? Ya no estás a merced de los elementos, de nuevo estás al mando.
Felicidades.
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