Las teorías sobre el origen del coaching son adversas y controversiales. Hay quienes sitúan su origen en prácticas retóricas de la antigua Grecia, mientras que otros apuntan a prácticas modernas llevadas a cabo por psicólogos del siglo XX.

No quiero que te marees entre tanta información, por eso decidí dedicar este post a tres cuestiones fundamentales: qué es el coaching, cuál es su función y dónde están sus orígenes.

¿Qué es el coaching?

El coaching es una metodología que se centra en reconocer y mejorar las llamadas “soft skills”. Básicamente, el coaching trabaja con tu potencial; aquellas cualidades que desconocías y que puedes aplicar a tu vida diaria.

Todo este trabajo se realiza para que la persona pueda cumplir sus objetivos más próximos y los que vendrán en el futuro.

En el campo ejecutivo, por ejemplo, esto significa que quienes lideran proyectos y equipos se someten a sesiones de coaching con la finalidad de mejorar habilidades que no se aprenden en un MBA.

El coaching mejora el rendimiento y desarrollo de una persona. Es un proceso personal e individual, aun cuando la sesión de coaching puede ser en grupo. El coach trabaja a través del diálogo y la enseñanza de nuevas herramientas.

La estructura de trabajo de un coaching se da de la siguiente forma:

  • Diagnóstico de la situación
  • Definición de metas
  • Implementación de herramientas para el cambio
  • Medición de los objetivos

La mejor imagen que se me ocurre para encarnar el coaching es la de un viaje. El coach pondrá ante ti el mapa, te ayudará a definir el destino y construirá contigo una hoja de ruta para llegar a tu meta.

¿Para qué sirve?

El coaching se implementa hoy en día en áreas tan dispares como el deporte, management, emprendimientos, e incluso en la vida personal.

¿Por qué funciona en todos estos ámbitos? Porque el coaching sirve para mejorar la definición de objetivos, la toma de decisiones, el rendimiento, la valoración personal, la adaptabilidad a diferentes entornos y cambios, y las implicaciones de nuestras acciones en los otros.

El coach es un guía y facilitador en este proceso de crecimiento. Esto significa que el coaching es una metodología que no interviene en la toma de decisiones ni en el quehacer de quien recibe estas herramientas.

La finalidad de un coach es generar un diálogo en un entorno de confianza para que la persona descubra habilidades, obstáculos y áreas de oportunidad para alcanzar sus objetivos.

¿Cuál es su origen?

La etimología de “coach” proviene del húngaro. En la ciudad de Koc, cuya pronunciación es “kotch”, se fabricaba un carro ligero y rápido que se utilizó a lo largo de toda Europa en el siglo XVII. 

La palabra “coach” aparece en la Universidad de Oxford en el siglo XIX para describir a un tutor que ayuda a los estudiantes a conseguir sus objetivos académicos, es decir, a ir del punto A a B.

Coaching qué es y para qué sirve

Como te comentaba al principio, el origen del coaching se remonta, para muchos autores, a las prácticas mayéuticas del filósofo griego Sócrates. Esta práctica se basa en hacer preguntas constantemente al aprendiz para que pueda llegar al conocimiento.

Hay un consenso generalizado en que la psicología humanista de los años 50 y 60 tiene una gran incidencia en el coaching actual. Siguiendo el existencialismo, esta rama de la psicología apuesta por el autoconocimiento, considerando al ser humano como un todo con libertad de elección, necesidades y cambios. 

The Inner Game

Para otros, el principio del coaching está en el mundo del deporte. El entrenador de tenis Timothy Gallwey es el autor de uno de los libros clave del coaching: The Inner Game. 

Su concepto del “juego interior” hace referencia a aquello que está pasando en nuestra mente, independientemente del juego que ocurre en el exterior. Ser consciente de nuestro diálogo interno, según Gallwey, es la diferencia entre el éxito y el fracaso.

El trabajo de Gallwey se adaptó y migró dentro del mundo anglosajón al terreno empresarial, siendo una de las primeras iniciativas fundacionales de lo que hoy conocemos como coaching.

Estos conceptos se fueron consolidando a lo largo de los años 80, derivando en una metodología que combina filosofía, psicología humanista y estrategias deportivas, para dar como resultado lo que hoy llamamos coaching.

Si esta descripción te ha parecido interesante y deseas conocer más acerca de esta disciplina, te invito a que leas sobre la solución de coaching empresarial que ofrezco y descubras si esta resultaría útil para ti.