Referencia de la imagen: https://spanishinlibrary.wordpress.com/2011/02/05/numeros-de-telefono-telephone-number-in-spanish/

No sé si hay una pregunta menos adecuada para abrir una conversación telefónica…

Cuando descuelgo el teléfono y la persona me hace esta pregunta, lo primero que me viene a la mente es: “buen momento ¿para qué?”

Si estás haciendo una llamada de ventas, lo que necesitas es ser concreto e ir al grano. En principio no vas a intentar hacer la venta por teléfono en ese momento – o eso espero. Más bien buscas normalmente una cita, o transmitir alguna información.

Si no te conocen, lo adecuado es decir quién eres (tu nombre, y la empresa con la que trabajas), qué tienes de valor para ellos e intentar organizar una reunión. Si empiezas preguntado si es buen momento, tendrías que haber explicado antes para qué. ¿Para explicarte todas las características de mi producto por teléfono? ¿Para hablarte de mi empresa? Normalmente la persona con la que necesitas hablar (la que tiene que tomar la decisión a la larga) no está en su despacho esperando a que llame alguien para tener algo que hacer.

En realidad esta pregunta es una forma de generar una obligación al otro, sin que hayas dicho claramente lo que pretendes. Si dice que sí es un buen momento, parece que te está dando carta blanca para estar al teléfono 20 minutos, por ejemplo. Lo peor de esto es que, a personas ocupadas con tiempo limitado, esta pregunta les puede parecer una manipulación. En lugar de decir lo que buscas o pretendes en esta conversación, empiezas pidiéndole a la persona que se comprometa a la conversación.

Probablemente creas que estás mostrando educación, pero si lo piensas bien, el otro no puede contestarte “No” sin que se pueda preguntar ¿entonces, para qué he cogido el teléfono?, ni “Sí” sin que sienta que te está dando carta blanca, sin saber en realidad lo que quieres.

Esta pregunta no es una buena manera de comenzar a generar confianza, ni de transmitir la idea de que estás atento a lo que necesita, ni de que principalmente quieres ofrecer el mejor valor para su empresa.

Una versión aún más “escurridiza” de esta pregunta es: “No sé si te pillo en buen momento”. Efectivamente, no lo sabes, te pueden contestar. Ahora, ¿qué haces?

Hacer preguntas implícitas, sin hacerlas claramente, te posiciona. Estas diciendo que no hablas claro, no te atreves a decir cosas que puedan generar un no, o una respuesta incómoda y, por lo tanto, probablemente no me pueda fiar de ti.

Una vez más, no es la mejor manera de presentarme ante un cliente.

Preséntate, dí lo que quieres y que sea el otro quien decida si es buen momento o no…

(*) Si es un amigo o conocido, le suelo contestar: “Si es para pedirme dinero, es muy mal momento”!